Nuevo Profoto OCF Octa 3’ ¿Merece la pena?
Hace años que Profoto fija su punto de mira en aquellos usuarios que quizás tienen menos facilidad para desembolsar grandes cantidades de dinero. No necesariamente hablamos de aficionados a la fotografía, simplemente son personas que han decidido que no merece la pena invertir tantísimo dinero en un equipo de iluminación. Obviamente un gigante como la compañía Sueca sabe perfectamente cuales son las corrientes que marcan el mercado y si han decidido sacar productos a menor precio con menor calidad será porque debe funcionar. Personalmente yo me alegro de que esto ocurra porque siendo usuario de Profoto desde la época en la que solamente habían equipos realmente caros, era muy difícil comprar material de esta marca. Piensa que mi primera compra fue de más de 6000€ y apenas compré dos puntos de luz y unos cuantos modificadores. Eso si, los modificadores a día de hoy siguen funcionando a la perfección. Sin embargo los softbox de la serie OCF no tienen esa durabilidad y esto obviamente no es ningún secreto. Todo el mundo sabe que los softbox de la serie OCF son más económicos porque están hechos con peor calidad que los de la serie RFi. La marca y los proveedores tratarán de buscar la palabra adecuada para no decir abiertamente que son peores, pero hablamos de eufemismos que a fin de cuenta la gente procesa claramente.
Yo mismo soy usuario de la gama OCF, me gusta precisamente porque no tengo necesidad de darle un uso intenso a mis softbox, los cuido y duran lo suficiente. Me parece que dan un buen servicio aun siendo de peor calidad que los RFi y honestamente estoy feliz.
Octa 3’ OCF
Hace unos días Profoto anunció la llegada de un nuevo octa a la lista de modificadores OCF (Off Camera Flash) el Octa 3’. Este es el estándar de softbox con forma octogonal porque tiene un tamaño medio, ni muy pequeño ni muy grande. Da una luz genial y honestamente, para mi es el mejor y el más versátil de los Octa. Si bien es cierto el Octa 4’ da una luz más bonita, no siempre se puede utilizar en exteriores ya que cuando hay viento se complica mucho el shooting, además para transportarlo es más complejo por el tamaño de las varillas que es mayor e intimida un poco más cuando está abierto ya que mide 120 cm, consiguiendo que sea difícil pasar desapercibido allí donde lo abras.
La luz de este Octa 3’ OCF es fantástica: suave y envolvente. Cumple perfectamente su cometido y sin duda lo recomiendo. Sin embargo tiene un pequeño problema del que debes ser consciente. Las varillas son demasiado duras y esto provoca que al intentar colocarlo en la anilla, que debes comprar aparte por cierto, acabes teniendo dificultades. Son muchos los usuarios que se han quejado de lo difícil que es colocar un Octa de este tipo en su anilla. No solo en la versión OCF, también en la RFi. De alguna manera hay que tener cierta maña para esta tarea, sin embargo lo que realmente me ha molestado es que la anilla OCF se acaba rompiendo cuando lo intentas poner, o al menos así me ha ocurrido a mi en dos ocasiones en un lapso de tiempo de menos de diez días.
OCF Speedring
La anilla OCF está construida en metal, aparentemente tiene bastante calidad pero el interior donde se fijan las varillas tiene un problema, está diseñado de tal forma que puedas colocar en dos posiciones cada varilla: posición diagonal sin presion; posición final con presión. Para conseguir “sujetar” la varilla y que la presión no la saque del lugar donde la has colocado a Profoto se le ha ocurrido poner un pequeño pin metálico que es precisamente el que se acaba rompiendo, o se empieza rompiendo porque a mi se me ha roto dos veces a las primeras de cambio.
Hay que decir que esto no es el final de la anilla, obviamente puedes seguir usándola con otras ventanas que no necesiten colocar sus varillas justo en ese hueco, sin embargo cuando intentes poner el Octa no te quedará bien puesto o te costará muchísimo fijarlo porque continuamente se saldrá del hueco la varilla.
Conclusiones
Imagino que debe resultar complejo hacer una varilla lo suficientemente rígida como para que aguante la forma original una vez no estés usando el softbox pero no tanto como para que puedas doblarla con la mano y colocarla en el lugar que le corresponde. A mi me da la sensación de que esas varillas deberían ser un poco más maleables porque en serio, cuesta mucho montar la ventana de luz.
Esto no significa que no recomiende su compra, simplemente creo que debemos ser conscientes de lo bueno y lo malo que tiene un producto cuando vamos a desembolsar 249€ por él más los 99€ de la anilla. Hablamos de 348€ en un modificador de luz y lo mínimo que uno espera es que al menos pueda montarlo sin tener que sudar y acabar con las manos doloridas.